Estrella del karaoke
En cada karaoke hay un par de magníficos cantantes que se esconden entre el público borracho. Rémoras de la pasión. Piojos del micrófono. Yo estaba sentado, bebía sin ganas y esperaba mi oportunidad para abordar Suspicious Minds de Elvis Presley como un cuchillo de pan aborda los pulgares. De esa forma sinuosa, dolorosa, escandalosa e inesperada. La vida pasaba viscosamente en aquel karaoke madrileño al que había obligado a ir a mis amigos porque necesitaba cantar.
Comentarios recientes